El Ficus obliqua es un árbol de rápido crecimiento que puede alcanzar los 30 m de altura. Tiene hojas brillantes de color verde oscuro y produce pequeñas flores blancas que se convierten en bayas rojas comestibles. El árbol es originario de Australia, Indonesia y Papúa Nueva Guinea, pero puede encontrarse en muchos países tropicales del mundo.
Hábitat
El Ficus obliqua es una planta tropical que crece en las selvas del sudeste asiático. Es una planta epífita, lo que significa que crece sobre otras plantas en lugar de en el suelo. En su hábitat natural, puede crecer sobre árboles o rocas.
La planta prefiere las condiciones cálidas y húmedas y no tolera las temperaturas frías. Necesita un suelo bien drenado y con mucha materia orgánica. El Ficus obliqua también puede crecer en macetas o contenedores.
Beneficios del Ficus Virens
El fruto del Ficus obliqua es el que da nombre a este árbol. Estos frutos son pequeños y redondos, y tienen un color rojizo-púrpura cuando están maduros. Los frutos de este árbol no sólo son comestibles, sino también bastante nutritivos.
Ámbito de aplicación
El Ficus obliqua es una planta ornamental muy popular por su atractivo follaje y su hábito de crecimiento compacto. Puede utilizarse como seto o planta de pantalla o plantarse en contenedores. El árbol también se cultiva por su madera, que se utiliza en la fabricación de muebles.
Bonsái de Ficus Virens
El Ficus obliqua es una opción popular para los bonsáis debido a su disposición a crecer en macetas y contenedores pequeños. Se puede formar en muchas formas y estilos diferentes y es una excelente planta de interior.
Cuidados del Bonsái de Ficus Obliqua
Cultivo en contenedor: El Ficus obliqua se puede cultivar en macetas, pero con el tiempo se le quedarán pequeñas. Elija una maceta de al menos 24 pulgadas (61 cm) de ancho y profundidad. Replantéelo anualmente en primavera utilizando una mezcla de maceta que drene bien. Tenga cuidado al manipular esta planta, ya que la savia puede causar irritación de la piel.
Instrucciones de cuidado: El Ficus obliqua requiere pocos cuidados una vez establecido. Regar regularmente durante la temporada de crecimiento, pero dejar que la tierra se seque entre los riegos. Reduzca el riego durante los meses de invierno. Abonar en primavera con un fertilizante de liberación lenta.
Poda: Podar para darle forma según sea necesario. Esta planta puede ser podada severamente y rebrotará desde la base si es necesario.
Propagación: Se propaga por semillas o por esquejes. Tomar esquejes de tallo en primavera o verano y enraizarlos en una mezcla húmeda para macetas. Coloque el esqueje bajo alta humedad hasta que arraigue, lo que puede llevar de varias semanas a varios meses. Las semillas germinan mejor a temperaturas de entre 20 y 30 °C (68-86 °F). Escarifique las semillas antes de plantarlas para mejorar el índice de germinación. Plante las semillas a ¼ de pulgada (0,64 cm) de profundidad en una mezcla húmeda para macetas.