Ficus Variegata: La guía completa para su cuidado

El Ficus Variegata es un árbol hermoso y popular que puede encontrarse en muchos hogares y oficinas. Si tienes la suerte de tener uno de estos árboles, debes asegurarte de que lo cuidas adecuadamente. En esta guía, hablaremos de la forma adecuada de cuidar su Ficus Variegata, de cómo reproducirlos y de cómo trasplantarlos si es necesario.

ficus variegata

Tipos de Ficus Variegata

Hay muchas variedades de Ficus Variegata, y pueden variar mucho en tamaño, forma y color. La variedad más común es el ficus sagittata variegata, el ficus radicans variegata, el ficus rubiginosa variegata y el ficus deltoidea variegata.

Cuidados del Ficus Variegata en casa

El Ficus Variegata puede ser un árbol quisquilloso, pero con los cuidados adecuados es una excelente planta de interior. Son originarios del sudeste asiático y prefieren condiciones húmedas con luz brillante e indirecta. Si vive en un clima seco, tendrá que rociar su Ficus a diario o mantenerlo en una habitación con un humidificador. A estos árboles también les gusta estar en el lado más seco, así que deje que la pulgada superior de la tierra se seque antes de volver a regar.

Abone su Ficus cada dos meses durante los meses de primavera y verano con un fertilizante de uso general diluido a la mitad. Puede reducir la fertilización a una vez por temporada durante el otoño y el invierno.

La poda es importante para mantener la forma de su Ficus Variegata. Pode después de que aparezca el nuevo crecimiento en primavera. Para podar, simplemente recorte las ramas que sean más largas de lo que le gustaría. También puede eliminar las hojas y ramas muertas o dañadas según sea necesario.

Ficus sagittata variegata

Formas de propagación del Ficus Variegata:

Aunque hay varias formas de propagar el Ficus Variegata, la más fácil es tomar esquejes. Los esquejes deben tener entre 10 y 15 centímetros de largo y deben tomarse de los nuevos brotes. Asegúrese de eliminar las hojas que queden por debajo de la línea de flotación. Coloca el esqueje en una jarra o jarrón con agua y espera a que se formen las raíces. Una vez que se hayan formado las raíces, puedes trasplantar el esqueje al suelo.

Si buscas un método de propagación más difícil, puedes probar la estratificación aérea. El acodo aéreo consiste en enrollar una rama y cubrirla con musgo Sphagnum húmedo. El musgo fomentará la formación de raíces en el lugar de la herida. Una vez que se hayan formado las raíces, puedes cortar la rama por debajo de la herida y plantarla en una maceta.

La propagación por semillas también es una opción, pero es más difícil y requiere más tiempo. Para propagar las semillas, hay que plantarlas en un medio de cultivo estéril. Una vez que las semillas hayan germinado, puedes trasplantarlas a macetas individuales.